Yñigo Díaz de la Campa se marcó un doblete esta noche, ya que venía de tocar con Mary Rockings en Barakaldo, pero el virtuoso guitarrista no defraudó junto a Ready Aim Fire en esta noche en la que presentaban “Leviathan”, su segundo trabajo discográfico. Un disco al que dieron prioridad en el repertorio, aunque con algún que otro rescate tan significativo de su debut como el caso de “Wild Dreams”, que presentaron presumiendo de haber conseguido un premio.

La formación está compuesta por músicos de mucho nivel a mi modo de ver, en todos los casos con tablas y experiencia. Con Eduardo Martínez  (Anarko, ex Vhäldermar..) en la batería imponente; Gotxi Ibarra, cuya andadura se remonta hasta los años 70, impregnando de magia el sonido de la banda con su teclado sonido hammond que tan al dedo le va al estilo de la banda; e Ignacio Forpez muy expresivo en el bajo y también virtuoso con su instrumento. No quería quedarse a la zaga de sus compañeros, entre los que Yñigo destaca por esa majestuosidad con la guitarra, hace un tiempo muy deudora de Malmsteen, pero en la actualidad muy tendente al sonido del maestro Blackmore. Entre Purple y Rainbow se reparte buena parte de la influencia de sus temas. A ello también contribuye la versátil voz de Charlie Santiago, que maneja su voz a la perfección en este sonido clásico que siempre deja lugar para dejar volar diferentes registros.

Se marcaron un concierto de órdago...

El Rock es para siempre. Y qué mejor manera de demostrarlo que con una banda en la que confluyen diferentes generaciones de músicos orientados hacia un sonido de raíz, sin adulterar, pero libre y creativo, haciendo fluir su calidad en directo con un aroma imperecedero del rock de los 70, que mientras se siga manteniendo la llama viva a través de bandas como Ready Aim Fire sigue siendo también el de estos tiempos.